¿Frío? Lo último es el estiércol para calentar tu casa

Los excrementos de una vaca podrían generar 20 kWh de energía al día gracias a un sistema que usa el estiércol para producir gas natural

El estiércol de las granjas no solo puede servir como abono, también como fuente de energía para calentar una vivienda. Ahora investigadores canadienses han desarrollado una tecnología para generar combustible en forma de gas viable y sostenible.

El trabajo, desarrollado por científicos de la Universidad de Waterloo en Canadá,  resalta que este sistema eliminaría las dañinas emisiones liberadas por la descomposición natural del estiércol cuando se propaga en los campos de cultivo como fertilizante.

“Hemos desarrollado una tecnología que convierte el estiércol en biogás  y este biogás, compuesto por aproximadamente 50% de metano y 50% de dióxido de carbono, se actualiza a gas natural renovable en un convertidor catalítico”, explica a Eltiempo.es, David Simakov, miembro del Departamento de Ingeniería Química de la Universidad de Waterloo y autor principal del artículo.

Los autores de este trabajo detallan que el resultado es un gas natural renovable e intercambiable con el gas natural convencional que utiliza la red de abastecimiento.  “La generación de gas natural renovable en una gran granja lechera es técnicamente factible y económicamente viable”, detalla Simakov.

El estiércol: un enorme potencial

Además recalcan que esta tecnología aplicable con el estiércol de procedente de granjas de vacas y de cerdos. «Hay varias formas en que podemos beneficiarnos de este enfoque único. El potencial es enorme», explica el experto.

Las estimaciones calculadas reflejan que los excrementos de una sola vaca podrían producir gas natural renovable que equivaldría a aproximadamente 20 kWh por día.

Los excrementos de una sola vaca podrían producir gas natural renovable que equivaldría a aproximadamente 20 kWh por día

Para probar esta tecnología, los expertos realizaron una instalación en una granja de 2.000 cabezas de ganado vacuno.  Recolectaron el estiércol y a través del catalizador diseñado por estos investigadores se produjeron toneladas de biogás y se redujo su impacto ambiental.

Además, según detallan los expertos, este sistema podría ser utilizado por industrias, edificios, viviendas e incluso podría reemplazar el combustible diésel para camiones en el sector del transporte, una de las fuentes principales de las emisiones de gases de efecto invernadero.

“Con las tecnologías actuales podemos hacer la transición de la energía basada en fósiles a la energía renovable utilizando la infraestructura existente, lo cual es una gran ventaja», celebra David Simakov.

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